Año 3, número 20

Palos Altos, Jalisco, México

Hay una magia acogedora al llegar, puede ser la primera vez que vas o las milésima y el sentimiento de saberse bienvenido ahí estará. Creo que lo especial aquí es que materializa un cúmulo de amor, esperanza, lucha, trabajo, bondad… El Caracol ha tenido varias casas y ahora encontró su hogar. Es un espacio seguro que sostiene los pies que lo tocan, aprieta las manos que lo trabajan y alienta las mentes que lo visitan. 

Al adentrarme en la visión de este lugar, encontré una espiral de encuentros y desencuentros de lo que es la educación, la crianza y la colectividad. Hay una reorganización de lo que solía entender y de lo que solía pasar por alto, me enseñó a ser aún más empática, no sólo con las personas, sino también con cada elemento de este mundo, me enseñó que hay vida en cada rincón y que ese rincón también es importante.

Esa espiral que forma el Caracol y lo que representa para mí, pasé de pensar que se llama así porque hay caracoles, como  dijo un pequeño de los que nos visitan, a sentarme y pensar en cómo cada paso pequeño y acción pequeña no es tan pequeña realmente y va sumando a un camino por recorrer, como el Caracol avanza “sin prisa” a los ojos ajenos pero con determinación desde sus propios sentipensares.

Ahora que tengo la dicha de estar aquí, veo a mis niños como ese caracol y cómo cada avance que para unos es lo cotidiano, para otros es muy significativo. Escribir esto aquí mismo después de trabajar y jugar con uno de mis niños, me reafirma que estoy en el lugar correcto. Que de algún modo era destino, que así como yo desde pequeña me asombraba por el caracol y por David, yo ayudaría a otras niñeces a crecer en este amor y a darle significado completo a una frase resuena mucho conmigo, mi trabajo y mi contexto, la primera vez que la escuché fue en Caracol.

El título de este texto “Crisálidas”, resume un poco estos pensamientos. La crisálida es el estado de un insecto previo a la adultez. En comparación con lo que para mí representa el Caracol y mi trabajo en él, es esa crisálida para romperla, crecer y volar, es la búsqueda conjunta de todos los que pasamos por ahí, no a trabajar, sino a soñar que podemos ayudar en la formación de otras personas y espacios.