Año 2, número 12
San Isidro Municipio de Berriozábal, Chiapas.
Sandra Elena Cruz Domínguez
Mi nombre es Sandra Elena Cruz Domínguez, actualmente soy presidenta del comisariado ejidal de San Isidro, municipio de Berriozábal, Chiapas. San Isidro es una comunidad rural, situada a 14 km de la cabecera municipal de Berriozábal. Tomé el cargo en febrero del 2021 siendo uno de mis más grandes retos el representar y ser elegida por los ejidatarios en la asamblea, en esta travesía, al inicio mis propuestas e ideas fueron cuestionadas y poco valoradas, pero con esfuerzo y el trabajo en equipo con las mujeres de mi comunidad se han realizado proyectos productivos que han generado un ingreso extra a las madres de familia involucrándonos en actividades que antes solo realizaban los hombres y hoy en día puede ser una actividad compartida, además en administraciones pasadas padecíamos discriminación en nuestras opiniones Incluso en las asambleas la que opinara era motivo de burla, lo que desanimaba la participación de mis compañeras y el miedo a levantar la mano para ser escuchadas, esto se ha mitigado a través de la sensibilización de talleres dirigido a las mujeres de la comunidad.
Así mismo, para ir disminuyendo los problemas mencionados se siguen gestionando cursos y talleres que han permitido fortalecer la integración de los grupos de trabajo para mejoras de la comunidad, resalta la implementación de proyectos productivos con enfoque sustentable, como es el caso del huerto comunitario “San Isidro” que está conformado por mujeres de nuestra comunidad, en donde se participa desde el cultivo de la semilla, la elaboración de compostas con desechos orgánicos de la comunidad y se siembra gran diversidad de plantas, desde plantas aromáticas hasta las de consumo y para la venta de los productos y sus derivados, lo que ha motivado la participación de las mujeres en sus tiempos libres, esto ha trascendido a que las mujeres de San Isidro implementen sus propios huertos en casa y demostrar lo aprendido en los talleres y trabajos del huerto.
Conocer todo el proceso de este hermoso trabajo, ha traído grandes beneficios a la comunidad donde nos dispusimos a trabajar para un bien común, poniendo las esperanzas de tener una mejor calidad de vida. Iniciamos con el proceso de realizar el huerto comunitario teniendo en un inicio talleres muy valiosos desde conocer el tipo de suelo, decidir qué modelo de huerto queríamos, hasta la plantación y cosecha. Algunas de las mujeres de la comunidad, tenían ya experiencia en cultivos, otras al igual que yo, desconocíamos muchas cosas, en este proceso de integración y trabajo en equipo, logramos realizar un banco de semillas que pertenece a las integrantes del huerto comunitario, qué nos ha permitido compartir con otras comunidades o vender las semillas. Este proyecto ha sido de gran aprendizaje para trabajar en equipo y lograr tener un huerto con diversidad de varias hortalizas, guiadas por un joven entusiasta qué ama su profesión y trabajo, y nos inspira también a investigar las propiedades de cada plantación que tenemos y de qué manera las podemos consumir.
El huerto comunitario San Isidro, ha logrado tener su propio logo, así como también vender fuera de la comunidad, como han sido los chiles en conserva y otras hortalizas.
San Isidro cuenta con su propio huerto comunitario, un huerto como pocos, diferente a todos, lleno de luz por las noches, único lo describo yo, con historias de cada una de las mujeres que participan en este. También nos sirve como medicina del alma llegar a trabajar, reír y contarnos los problemas y alegrías. Es símbolo de que las mujeres podemos hacer muchas cosas a la vez, pero sobre todo trabajar con amor y dedicación para tener una alimentación sana.
Hoy puedo decir con mucho orgullo, que disfruto el degustar comer una ensalada que estoy 100% segura que es completamente natural, sin ponerle cosas que dañan al ambiente y a nuestro organismo, comer sano le ha dado más valor, ahora que he aprendido cómo se realiza y la importancia de cuidar con amor nuestras plantaciones. Lo comparo como cuidar a un hijo, es agradecer a Dios por todas las bendiciones que nos da.