No obstante, las comunidades campesinas experimentan profundas transformaciones que han afectado su integridad territorial, económica y social. La agricultura campesina ha sufrido modificaciones radicales y uno de los fenómenos que propician tal cambio es la pobreza, que ha marginado el campo mexicano y lo ha llevado a procesos de abandono y migración de las poblaciones hacia las zonas urbanas. Además, al igual que en el resto del mundo, en México se ha presentado un cambio drástico en la demografía urbano-rural y actualmente aproximadamente el 80% de la población mexicana reside en las principales ciudades del país. 

Por otro lado, la crisis alimentaria también está relacionada con la marginación del campo mexicano. Este es un fenómeno inédito de la historia del capitalismo, debido a que los granos básicos se han convertido en objetos de especulación en los mercados financieros. Esto ha hecho que sus precios suban y bajen constantemente, ya que se usan para compensar la caída de otras inversiones, como las acciones. Todo esto genera una gran inestabilidad en el sistema agroalimentario a nivel global.

En cuanto al proceso de globalización de la agricultura, una de sus características es la interconexión de las cadenas productivas a nivel internacional y el creciente poder de las corporaciones multinacionales sobre la producción, el procesamiento y la distribución de los alimentos y, de manera indirecta, también sobre lxs consumidorxs. La expansión de las empresas transnacionales en la agricultura ha colocado a lxs campesinxs de los países en desarrollo a competir con sistemas productivos intensivos, que cuentan con amplios subsidios, por los que son capaces de producir bienes a bajos costos y a venderlos precios que no representan los costos de producción y menos de los impactos ambientales.

Seguir siendo campesinx

Al preguntar acerca de los motivos que orientaron a lxs campesinxs a dedicarse a la agricultura, muchxs campesinxs mencionaron la influencia familiar, la remuneración económica y la aptitud y gusto por trabajar la tierra como los motivos principales. La combinación de las tres opciones parece explicar el porqué de inclinación de lxs campesinxs por la agricultura. Asimismo, se mencionó la importancia de la influencia familiar, ya que el valor que ellos le atribuyen a la tierra que les es heredada por familiares, o el cariño que le toman, es un factor muy fuerte para dedicarse al campo, aunque en conjunto con las otras dos opciones se complementa un perfil más fuerte de los motivos que orientaron a estas personas a ser agricultorxs. 

Acerca de los problemas que enfrentan lxs campesinxs con más frecuencia al trabajar sus tierras, se mencionó los elevados costos en insumos para fertilizar la tierra y la carencia de mano de obra para el mismo propósito. Además, una minoría señaló la falta de disponibilidad de agua. En este sentido, las problemáticas principales son a causa de los cambios en la agricultura, es decir, aquella que sigue un modelo tecnificado. Precisamente, algunos de los ejidatarios explicaban que el terreno del que eran propietarios tiene deficiencias en cuanto a la fertilidad. Motivo que justifica la compra de insumos para aprovecharla, sin embargo, éstos son cada vez más caros, lo cual afecta, sumando la carencia de mano de obra, la producción de sus cultivos.

En tanto a las opciones que distinguían a unx agricultorx, se mencionó la sabiduría con respecto al trabajo del campo y también el amor por la naturaleza. De esta manera, la selección de éstas permitió observar que el uso de su tierra va más allá de una ganancia económica, tiene que ver con una práctica de valoración de sus propios conocimientos con relación al entorno que los rodea.