Año 2, Número 2

Autor: Gonzalo D. Álvarez Ríos

¡¡¡Lucharaaaaaaaaaaaán a dos de tres caídas sin límite de tiempo!!!

En la esquina ruda con un tamaño de 19 mm y un aparato bucal capaz de perforar a los magueyes más macizos, con un récord de daño de 80% en plantaciones de maguey en Jalisco, 60% en Yucatán y 30% en Tlaxcala. La pesadilla de los magueyeros, el demoledor de plantaciones ¡¡¡eeeeeeel Picudooooo!!!

Como retador en la esquina contraria, de bajo costo, utilizando materiales accesibles, fácil preparación, almacenaje y empleo. La alternativa agroecológica, la esperanza contra plagas y enfermedades, ¡¡¡el Caaaaaaaaaaaaldo sulfocáaaaalcico!!!

Suena la campana…

Scyphophorus acupunctatus, alias el picudo, es un escarabajo negro que representa la plaga de maguey más grave en México. Este voraz pequeñín habita, se alimenta y pone sus huevecillos en los magueyes. Al nacer las larvas perforan el maguey y crecen devorándolo desde su interior, ya de adultos salen para aparearse, poner huevos en otro maguey y continuar el ciclo. Esto genera que los magueyes se pudran por completo, acabando con plantaciones enteras.

Fotografías cotesías de Gonzalo D. Álvarez Ríos

El picudo afecta a todas las especies de Agave, como el tequilero (Agave tequilana), pulquero (A. salmiana) y fibrero (A. fourcroydes), pa´ pronto agarra parejo. El problema se ha agudizado por el auge del cultivo de maguey, principalmente para producción de mezcal y tequila, ya que al llevar magueyes de un lugar a otro para establecer nuevas plantaciones llevemos también a los picudos, infestando áreas donde antes no estaban ¡seguro te los has topado! 

Entonces ¿qué hacemos?, ¿cómo combatirlos? Aplicar insecticidas químicos además de riesgoso para la salud es ineficaz, ya que el picudo y sus larvas se encuentran la mayoría del tiempo dentro del maguey, dificultando que el insecticida entre en contacto con ellos. 

Ante esto, te proponemos una estrategia para el combate contra el picudo basada en varias pero sencillas prácticas. Para comenzar ¡el caldo sulfocálcico!, un bio-insumo mineral útil para controlar plagas y enfermedades. Ahí va la receta:

  • 20 litros de agua
  • 4 kg de azufre
  • 2 kg de cal hidratada
  • Olla metálica
  • Palo de madera
  • Embudo metálico 
  • Telas o colador 
  • Envases de plástico rígidos con tapa 
  • Aceite de cocina
  • Cubrebocas o pañuelo
  • Fogón en espacio abierto
  1. Durante toda la preparación utiliza un cubrebocas para evitar inhalar polvos y vapores. 
  2. Coloca en el fogón la olla con agua para que hierva. 
  3. En un espacio sin viento mezcla el azufre y la cal en un recipiente limpio y seco.
  4. Cuando el agua hierva agrega lentamente el azufre con cal, evita que el polvo caiga en el fuego pues es flamable.
  5. Menea lenta y constantemente con el palo para incorporar completamente los polvos y evitar que se peguen en el fondo. El fogón debe estar bien prendido para lograr una buena reacción. 
  6. Muévele durante 40 min. aproximadamente, la mezcla estará lista cuando cambie de color, pasando de amarillo a rojo ladrillo intenso. 
  7. Retira del fuego, espera a que se enfríe y asiente. 
  8. Ya frío, con ayuda del embudo y el colador vacía la mezcla en los contenedores de plástico (asegúrate que sea plástico muy rígido, preferentemente de color oscuro), agrega al final un chorrito de aceite de cocina para conservarlo mejor y pon la tapa, este concentrado te durará de 6-12 meses.
  9. La pasta sobrante al fondo de la olla almacénala en otro contenedor para aplicarla en podas de árboles y evitar infecciones o enfermedades. 

Este caldo funciona como repelente del picudo y para reducir el daño de sus perforaciones, ya que éstas facilitan la entrada de patógenos como la negrilla (Asterina mexicana) o la mancha anular (Didymosphaeria sp.). Para aplicarlo, diluye el concentrado en agua al 2%, por ejemplo para preparar 100 litros, usas 2 litros de caldo sulfocálcico y 98 litros de agua, para un bomba de 20 L, 400 ml de caldo y el resto de agua, o para 5 L usas 100 ml de caldo.

Con una bomba de aspersión aplica por las mañanas a todo el maguey y al suelo alrededor. Cuando tengas una infestación grave aplícalo cada 15 días, si deseas hacer aplicaciones preventivas úsalo cada dos meses. Pero recuerda, el caldo sulfocálcico es solo una de las labores para el combate del picudo, para tener una estrategia integral podemos:

  1. Ubicar las plantas con infestación y retirarlas, cuida no dejar restos del maguey. También retira los magueyes que acabaron su producción de tu parcela, júntalos en un solo sitio y compostéalos. Así evitas que en estos espacios se reproduzca y alimente del picudo.
  2. Usar trampas para picudo, estas son sencillas de manejar, de bajo costo y efectivas. Para hacerlas, necesitas una cubeta de plástico (azul, verde o roja) con su tapa, haces 4-6 orificios de 3 cm de diámetro en la parte superior de la cubeta. Cerca de tus magueyes excava un hoyo para enterrar la cubeta hasta la altura de los orificios (sin cubrirlos). Dentro de la cubeta añade agua con jabón y al centro en un recipiente hondo pon trozos de piña o plátano maduros, esto funcionará como atrayente alimenticio para los picudos, que al entrar en la cubeta por los orificios caerán en el agua con jabón y no podrán escalarla. Revisa tu trampa cada 3-5 días para sacar (y apachurrar) a los picudos que hayan caído, así como cambiar el agua con jabón y la fruta si es necesario.
  3. Tener un sistema de cultivo diverso, alterna hileras de maguey con otros cultivos como maíz o frutales. Si tienes un monocultivo de maguey estás poniendo un banquete para los picudos, pero si alternas tus magueyes con otras plantas le complicas a los picudos brincar a magueyes sanos y permites que más aves perchen en estas plantas y se coman a los picudos.

¡¡¡Ahora ya sabes la estrategia, mucho éxito y que ganes el combate!!!